Australia está situada en el hemisferio sur, eso hace que las estaciones del año vayan al revés que en Europa o América. Cuando en Europa es verano, en Australia es invierno y viceversa. Aunque esto probablemente ya lo sabías.
Cuando pensamos en Australia, nos viene a la mente calor, sol y verano durante todo el año. Pero lo cierto es que no es exactamente así. La temperatura en Sídney puede variar drásticamente de la noche a la mañana. Puede que te levantes en un día soleado y que por la tarde caiga un chaparrón de ésos para recordar.
El clima de Sídney es oceánico, lo podríamos describir como subtropical húmedo, con veranos suaves e inviernos algo fríos. Su proximidad al mar hace que tenga temperaturas moderadas y en verano la sensación de calor se acentúa debido a la humedad. ¡Hay días en los que crees que te vas a derretir de calor!
Y los días de lluvia, en muchas ocasiones inesperados, ¡olvídate de los paraguas! Cuando llueve, suele estar acompañado de un fuerte viento, por lo que, si no quieres empaparte y quedarte con un paraguas roto, lo mejor será que lleves un chubasquero siempre contigo.
Del 1 de diciembre hasta finales de marzo.
Se caracteriza por tener días muy calurosos y lluvias de tarde imprevisibles, breves pero intensas. Eso sí, durante el verano las barbacoas en la playa son continuas y hay mucha actividad en la ciudad. En verano es la época en la que más turistas visitan la ciudad.
El mes de enero es el mes más caluroso, con temperaturas que pueden llegar a superar los 40 grados.
El otoño en Sydney:
Del 1 de abril a finales de mayo.
En marzo empieza a llegar el frío y con él el otoño. Aunque la temperatura empieza a descender, el clima es muy agradable. Hay algunos días de lluvia pero muchos otros con un sol intenso al mediodía que invitan a ir tanto a la playa como a la montaña.
Del 1 de junio hasta finales de agosto.
Al contrario de España, el invierno empieza en el mes de junio, y durante 3 meses el frío es el protagonista de la ciudad. Con unas temperaturas mínimas medias de unos 8 grados, los días son cortos y las noches más largas. El viento proveniente del ártico crea una sensación térmica un tanto fría. Aun así, los días son soleados y perfectos para salir a caminar.
El mes de julio suele ser el mes de más frío del año, con temperaturas alrededor de los 2 grados. ¡Brrrrrrrrrrrrrr!
Sin embargo, ¿Sabías que en Sydney sólo han visto nevar una vez? Y fue en el 1836…
Y no te preocupes por el surf. Si tu intención es surfear, debes saber que podrás practicar el deporte por excelencia australiano durante todo el año. ¡En Sydney siempre hay surfistas en el agua!
Del 1 de setiembre hasta finales de diciembre.
El clima durante esta época del año es sensacional. Perfecto. La lluvia no es la protagonista y la temperatura es suave, con mañanas algo frescas y tardes un poco más calurosas. Muchos australianos y extranjeros empiezan a ir a la playa a tomar el sol y hacer su primer chapuzón de la temporada. A todo esto, las calles se tiñen de color violeta debido a los árboles jacaranda.
