Puedes trabajar de lo que tú quieras. Nueva Zelanda es un país que ofrece ofertas de empleo en prácticamente todos los sectores, pero para conseguir un trabajo cualificado vas a necesitar un inglés perfecto, muchas ganas de trabajar y una actitud muy positiva. El camino no es fácil, pero muchos de nuestros estudiantes lo consiguen. ¡Tú puedes ser uno de ellos!
Cuando aterrizamos en Nueva Zelanda, la mayoría de nosotros lo hacemos con un nivel de inglés muy básico. Por eso, los trabajos a los que solemos optar son, por ejemplo, como lava platos, en el sector de la limpieza, la jardinería, la construcción, las mudanzas, como niñera/o…
Con cualquiera de esos trabajos podrás sobrevivir en Nueva Zelanda y, si te organizas bien, incluso puedes ahorrar algo de dinero para viajar. Si eres de los que vienen con la idea de «trabajar en lo que sea», ¡estamos convencidos de que encontrarás algo en muy poco tiempo!
Tienes que tomarte esta experiencia como una nueva aventura en tu vida, centrarte en lo positivo y sobre todo abrir tu mente para adaptarte cuanto antes a todo lo bueno que está por llegar.